Estimado Pedro:

 Hace algún tiempo quería escribirte, pero, borré tu dirección accidentalmente. El amigo Edgardo me la hizo llegar nuevamente.

He leído tus narraciones en Comunidad Hermética ( muy interesantes, en especial la del viaje al submundo marino). Hay algo que quisiera decir al respecto.

El desdoblamiento, proyección astral o mental, es uno de los procesos más importantes para la formación de una verdadera consciencia mágica.

Como seguramente sabes, esta técnica tiene un lugar especial en el estudio de las escuelas de los misterios, tales como, la Golden Dawn, la Orden Rosacrúz, O.T.O., etc. Estas escuelas hacen de  la proyección astral, una vía para obtener los conocimientos de otros planos de existencia.

Pensamos que por lo regular, las experiencias de un desdoblamiento, sin  objetivo claro o definido, y sin los debidos pasos de seguridad que la anteceden, lejos de ser beneficiosas, nos dejan a la merced de una extensa gama de influencias ajenas a nuestra voluntad, como en tu caso (….“viajar a un lugar hermoso e interesante que relajara mis nervios y alimentara mi alma”…. ).

Creemos que, el acto de la proyección astral es algo más que un simple paseo, relajante de nervios. Este es un proceso que implica una gran responsabilidad, donde el investigador debe tener dominio de la situación y saber hacia dónde se dirige. En resumen, tu Voluntad debe ser el timón del viaje.

En los caminos del mundo astral puedes encontrar toda clase de entidades, ( inferiores o superiores) aquellas que poseen una mente única no te harán ningún daño, a menos que les impidas alcanzar su objetivo. Otras que están conectadas con entidades del mundo físico, demasiado ocupadas para molestarte. Solamente exíste un tipo de entidad que habita en los planos superiores y puede resultar problemática: “tus propias formas de pensamiento”.En esos planos, los pensamientos toman diversas formas que representan su naturaleza y, no es necesario que las creemos conscientemente.

Exísten otros métodos para el viaje astral, por ejemplo: el Trabajo del Camino, ( empleado frecuentemente por estudiantes de escuelas iniciáticas)

En el que se requiere la utilización del tarot y las correspondencias Cabalísticas del Arbol de la Vida. Este trabajo, como nuestro mundo físico, es real, y lo interpretamos con nuestra mente y nuestros sentidos. De modo que es muy subjetivo. El practicante solamente puede fiarse de su propio conocimiento Cabalístico y su habilidad mágica.

Es importante, además, que hablemos sobre el elemento en el que se originó tu experiencia: el AGUA.

Como conoces, la naturaleza se compone de cuatro elementos básicos, que se interpenetran entre sí. Ellos son:

FUEGO,  AIRE,  AGUA,  TIERRA

En realidad se opera mágicamente con cinco elementos, resultando ser el ESPIRITU, la raíz de la emanación de los cuatro ya mencionados. Siendo ellos la base del trabajo de la filosofía iniciática.

Algunas escuelas occidentales atribuyen cada elemento a cada una de las puntas del PENTAGRAMA.

También,  el concepto oriental de TATWA ( vibración del éter) parece que  encuentra su orígen en la raíz misma de estos elementos. Los tatwas son fluctuaciones del manto ódico de la Tierra, estos vitalizan la substancia astral del planeta, emanando, en forma de corriente vital del Prana.

 Tatwas                 Simbología                                      Elementos

 

Akash                - ovoide de color negro ( curva            Espíritu

                             más pequeña, dibujada hacia      

                             abajo)

 

 Vayu                 - círculo de color azul                            Aire

 

 Tejas                 - triángulo rojo                                       Fuego

 

 Apas                  - creciente plateado                               Agua

 

 Prithvi                - cuadrado amarillo                               Tierra 

 

Estos símbolos pueden ser utilizados como ventanas astrales para investigar dentro de cada elemento ( como en tu caso, el elemento en el que se desarrolló tu experiencia es el agua, el tatwa correspondiente es apas).

Hay siempre un principio que no debemos pasar por alto: al mundo astral no se va a curiosear. Una véz allí, debes seguir los consejos del guía del elemento y no desviarte de tu objetivo ( si es que tienes alguno). Desobedecer esto, te resultará en experiencias, en ocaciones, peligrosas.

El agua, es el elemento disolvente ,por exelencia, y sin duda alguna, asociado con el proceso alquímico de la destilación.

El agua es, según el Génesis de diferentes religiones, el elemento Madre de donde surge la creación.

A través del agua es que purificamos nuestros cuerpos de las impurezas que contienen. Puedes darte cuenta que, muchos Médicos acosejan a sus pacientes, beber abundante líquido cuando alguna dolencia les aqueja. El agua siempre ha formado parte de la terapia suministrada por la Ciencia Médica. Por qué ? Por su poder disolvente y purificador.

Esta substancia no solamente limpia nuestro organismo físico, también nuestra mente. Ella actúa a modo de relajante y en ocaciones estimulante, ( en dependencia de la urgencia interior de quien la emplea) eliminando estados depresivos, ansiedades, etc.

Parece ser, en tu caso, que el subconsciente, conociendo tu verdadera urgencia de  liberar cargas de estréss, te condujo al medio apropiado. Estableciendo una relación con lo que, posiblemente sea conocido para tí ( la mitología griega ), está la presencia de este Guía del viaje, como tu mismo dices de aspecto griego y de nombre Neptuno

 Quizás, la curiosidad, lejos de aliviar tus nervios, te produjo más tension.

Nuevamente te digo, amigo, si no tienes un propósito claro y una previa preparación, no te aventures en viajes de placer a lugares que desconoces. Esto sería similar al viaje que realizara un aficionado y solitario fotógrafo al corazón de la selva del Amazonas.

Este relato, como los anteriores, nos parecen muy interesantes. A través de ellos podemos apreciar las inquietudes y el pérfil de la personalidad de quien los ha escrito.

Un saludo sincero:

 

Abel Acen. 

A Principal

Copyright © 1999 Edgardo Tousón.  Reservados todos los derechos.
Revisado: 21 de Junio de 2000