ASTROLOGÍA. Conocimiento
Trascendental.
Las Casas Astrológicas.
Edgardo Tousón
Al
nacer, el día, hora, latitud y longitud del lugar de nacimiento,
determinan doce divisiones sobre la rueda del zodiaco. Estas
divisiones se denominan Las Casas Astrológicas, y cada una
tiene que ver con un área de nuestra vida. Los planetas que se
relacionan con ellas determinan como serán las características
de cada una. En su transitar, los planetas hacen contacto con las
casas, marcando tiempo y momento para activar unas y deprimir
otras.
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La Casa uno (el Ascendente)
Por esta casa, recibimos
las características de nuestro cuerpo físico y gran parte de
nuestra personalidad. La armonía o inarmonía con la misma
casa de otra persona, produce, al conocerse, esa sensación de
rechazo o de simpatía a primera vista.
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La Casa dos
Es la casa de las adquisiciones.
Determina como nos comportamos para conseguir bienes materiales.
Nuestros ingresos, y cuales son las posibilidades y
limitaciones. También los gastos.
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La Casa tres
Rige las relaciones
cercanas, los hermanos y vecinos. Los viajes cortos y también
la mentalidad instintiva.
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La Casa cuatro
Es la casa paterna y
muestra la influencia de los padres durante la niñez. También
se relaciona con tierras y propiedades. Indica las condiciones
de nuestra vejez.
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La Casa cinco
El amor, la vida licenciosa,
la atracción y el sexo fuera del matrimonio. La especulación.
Los hijos y la educación.
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La Casa seis
La salud. El servicio que
nos rinden y el que debemos rendir.
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La Casa siete
El matrimonio. Nuestro
compañero/a. Las sociedades y litigios.
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La Casa ocho
La muerte. Las herencias y
las finanzas del compañero de matrimonio. Las facultades
latentes para las Ciencias Ocultas.
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Las Casa nueve
La religión. Las
aspiraciones espirituales. La mente elevada. Las leyes. Los
viajes largos.
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La Casa diez (el
Mediocielo)
El medio social, su recepción
y aceptación. El honor.
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La Casa once
Los amigos. Los compañeros
y los que nos quieren bien. Las esperanzas y aspiraciones.
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La Casa doce
La casa de la reclusión y
de lo oculto. Los enemigos secretos.
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